Se supone que debe comenzar un nuevo año, y tú no estás aquí,
y tantos sueños nos esperan.
Estoy aquí en nuestro departamento, frente a una vista impresionante,
pero el paso del tiempo me detiene aún más...

¿Cuándo volverás?

 

Salgo a la calle y me cuesta pensar o entender cómo ha sucedido todo esto.
Cómo los cielos aquí son azules, y cómo todavía hay olas en el mar,
y solo yo estoy atrapada entre la desesperación y la esperanza.
Idan, es tan difícil para mí, te necesito, mi ángel,
para que estés aquí conmigo.
Y el tiempo que pasa no ayuda ni contribuye...

¿Cuándo volverás?

Tenemos tantos planes para esta vida juntos,
y sé que vamos a hacerlos realidad uno tras otro.
Estoy aquí contigo,
estoy aquí contigo.
Pronto volverás a casa, mi amor,
y diré tu nombre “Idan”, y responderás: "Aquí estoy".

 

Mi Idan, ¿quién hubiera creído que la vida nos llevaría por semejante viaje?
Y sé que tú sabes que hay una razón para cada lección en nuestro camino, incluso si no siempre entendemos el motivo..
Creo en ti. Sé que tienes la fuerza interior para ver la luz, para creer en la salvación, para creer en la esperanza.

No te rindas. Estás volviendo a casa. Todo lo bueno aún está por delante de ti. Te amo.

 

Y cuando diga tu nombre, “Idan”, tú responderás: "Aquí estoy".